Una reciente polémica sacude al departamento de Soriano y ha puesto de manifiesto la tensión que se vive en el ambiente político local. Lo que comenzó como un acto protocolar por la asunción de las nuevas autoridades de la Junta Departamental, rápidamente escaló a un enfrentamiento verbal que encendió las alarmas y generó una ola de indignación, especialmente en la ciudad de Dolores. La figura central de la controversia es el intendente Guillermo Besozzi, quien en un cruce con un edil del Frente Amplio, dejó una frase grabada en un video que se viralizó: “¡Serás cagón! Tenías que ser de Dolores”.
El origen del incidente se remonta a la declaración del edil frenteamplista Damián Alonso, quien en la sesión inaugural manifestó públicamente que su bancada cumpliría su rol de contralor, con una especial lupa sobre la nueva administración de Besozzi. La vigilancia anunciada tiene un contexto: Besozzi enfrenta un proceso judicial con siete imputaciones por presuntos delitos de corrupción durante su anterior gestión, que incluso le impidieron asumir el cargo en su momento. Esta advertencia, según relató el propio Alonso, no le cayó nada bien al intendente.
Tras la ceremonia, y en un pasillo de la Junta Departamental, Besozzi se acercó al edil para recriminarle sus dichos. Fue en ese instante que Alonso, previendo un entredicho, decidió grabar la conversación. Al percatarse de la filmación, la reacción del intendente fue fulminante, descargando la ya famosa frase que no solo apuntó a su interlocutor, sino que también hirió la sensibilidad de toda una comunidad.
La respuesta no se hizo esperar. El video se propagó como la pólvora en redes sociales, provocando un rechazo masivo. La molestia no se limitó a las bases del Frente Amplio; la gente de Dolores, tanto oficialista como de la oposición, se sintió agredida. Una de las primeras en reclamar una disculpa pública fue la edila Luz de Alba García, quien en un acto de asunción en Dolores, frente al propio intendente, le exigió que se retractara. «Le pido que se disculpe con la gente de Dolores», le dijo de forma contundente.
Acorralado por la repercusión, Besozzi optó por la mesura. En sus disculpas, aseguró que se sentía «bastante doloreño» y que ya se había disculpado en privado con el edil Alonso. Sin embargo, en un intento de relativizar la situación, el intendente agregó que «lo cortés no quita lo valiente», una declaración que muchos interpretaron como una justificación a su accionar.
La polémica no solo reavivó la confrontación política en Soriano, sino que también mostró la división de opiniones entre la ciudadanía. Mientras que el Frente Amplio departamental emitió un comunicado respaldando firmemente a Alonso y calificando la actitud de Besozzi como «autoritaria» e «inaceptable», en los comentarios de las noticias digitales se pueden leer todo tipo de posturas. Algunos usuarios no escatimaron en calificar al intendente con adjetivos fuertes, mientras que otros, en un tono más resignado o crítico, defendieron a Besozzi o incluso culparon a los propios habitantes de Dolores por su elección. El incidente deja en el aire la pregunta sobre cómo se reencauzará el diálogo institucional y si este tipo de exabruptos son una señal de lo que vendrá en la gestión departamental.