El ministro Mieres convocó a una reunión de urgencia para intentar destrabar el conflicto y evitar nuevas medidas sindicales.
El eco del masivo paro de transporte que paralizó al país ayer lunes todavía resonaba en las calles cuando el gobierno movió ficha para intentar desactivar una crisis mayor. El Ministro de Trabajo, Pablo Mieres, convocó esta misma tarde a una reunión de carácter «grave y urgente» a los dirigentes de la UNOTT y a las cámaras empresariales. Sobre la mesa hay un solo objetivo: encontrar una salida al conflicto salarial que amenaza con un nuevo paro, esta vez de 48 horas, la próxima semana.
El paro de 24 horas del lunes tuvo un altísimo acatamiento y un fuerte impacto en la movilidad de todo el país.
La jornada de ayer fue un claro reflejo del poder de movilización del sindicato. Con una adhesión casi total, el paro dejó un saldo de cientos de miles de personas sin poder trasladarse, pérdidas económicas significativas y una fuerte señal de descontento. «El paro fue una demostración contundente de que los trabajadores no estamos dispuestos a seguir perdiendo salario», afirmó un dirigente de la UNOTT esta mañana, advirtiendo que «si en la reunión de hoy no aparece una propuesta seria por parte de las empresas, el conflicto se va a profundizar».
El gobierno, en su rol de mediador, busca acercar a las partes. La postura empresarial se mantiene firme en que el aumento de los costos operativos, sumado a una demanda que no se recupera, hace inviable la plataforma de aumento salarial que exige el sindicato. El ministro Mieres, por su parte, busca evitar a toda costa una nueva paralización que tendría un impacto aún más severo en la economía y en la rutina de los ciudadanos.
La reunión de esta tarde en la sede del MTSS es, por tanto, de máxima tensión. De lo que allí se resuelva dependerá si el país recupera la normalidad en el transporte o si se encamina hacia una nueva y más prolongada medida de fuerza. Para vos, que ayer tuviste que ingeniártelas para llegar a tu trabajo, la expectativa es enorme. La esperanza es que el diálogo pueda más que el conflicto y que la amenaza de otro paro se disipe.
